
Ser consciente de que estamos a la defensiva es el primer paso pero sin duda no basta para erradicar esta actitud. Por tanto, es importante que estés dispuesto a cuestionarte si realmente logras algo con esa actitud o si, al contrario, es un obstáculo para tus relaciones interpersonales y tu crecimiento. Si continúas buscando excusas para tu actitud defensiva, es que aún no estás dispuesto a cambiar, tienes demasiados recelos y miedos como para adoptar una actitud más abierta y dispuesta al diálogo. Sin embargo, si ya has comprendido que estar a la defensiva no conduce a ningún sitio, entonces estás preparado para el cambio.
¿Cómo dejar de estar a la defensiva?
- Asume que las personas no son adversarios. Es importante que comprendas que las relaciones interpersonales no son una batalla. Cuando asumes una conversación pensando que habrá un ganador y un perdedor, te pondrás a la defensiva porque, obviamente, no quieres ser quien pierda. Pensar que solo están intercambiando puntos de vista que te pueden enriquecer te permitirá adoptar una actitud más relajada y abierta a las ideas del otro.
- Cuando no comprendas el mensaje, pregunta. No te bases en suposiciones porque estas se sustentan en tu visión del mundo, que no siempre coincide con la de la otra persona. Cuando no entiendas alguna frase o un comportamiento te resulte extraño, en vez de sacar conclusiones, pregúntale a la persona qué ha querido transmitir.
- Mantén las emociones bajo control. A menudo las personas que están siempre a la defensiva son muy emocionales por lo que reaccionan exageradamente ante los estímulos del medio. En este sentido, asumir una actitud mindfulness puede ayudarte a manejar de manera más asertiva tus emociones.
- Desarrolla tu autoestima. En la base de una actitud defensiva se suele esconder una profunda sensación de inseguridad, la creencia de que seremos pisoteados a priori. Cuando tenemos una autoestima sana y nos sentimos seguros de nuestras capacidades solemos adoptar una actitud más abierta y receptiva.
- Toma las críticas como lineamientos para mejorar. Las personas que están a la defensiva a menudo les temen a las críticas porque las comprenden como si fuera un ataque a su integridad. Es cierto que hay personas que no saben expresar asertivamente una opinión negativa pero puedes pasar por alto el cómo lo dice para centrarte en el mensaje. ¿Tiene el mensaje algún valor que te permitirá subsanar un error y crecer como persona?
- Desarrolla la confianza. Estar a la defensiva implica, de alguna forma, tener una visión pesimista del mundo pensando que todos están en nuestra contra. Sin embargo, de vez en cuando se necesita un acto de fe, atrevernos a confiar en las personas y en su buena voluntad. No se trata de asumir una actitud simplista y bonachona sino simplemente de darles la oportunidad de que expresen realmente quiénes son y qué quieren, sin que les cortemos las alas antes de que hayan volado.
- Relájate. El estrés, la tensión y los conflictos pueden hacer que te pongas a la defensiva. Es normal porque cuando estamos en esta situación nuestro cerebro no es capaz de evaluar con mucha precisión los detalles de las situaciones y responde de manera más impulsiva, generando una respuesta de ataque o huída. Aprende ejercicios de relajación, te ayudaran a enfrentar la jornada con más calma.
Es obvio que estos cambios no ocurrirán de un día para el otro porque algunos requieren una profunda reestructuración cognitiva. No obstante, si te mantienes atento a tus respuestas y aprendes a controlar ese primer impulso de atacar y rebatir los argumentos del otro, poco a poco irás adoptando una actitud más abierta al diálogo solo puede traerte beneficios.
Manuel Xool dice
Me doy cuenta de que soy una persona que está siempre a la defensiva, es algo que quiero cambiar y que me va a ayudar mucho en la vida.
Jennifer Delgado dice
En efecto, estar a la defensiva nos hace adoptar una actitud más cerrada, que los otros notan, aunque sea de manera inconsciente, y que termina afectando nuestras relaciones interpersonales.
Virginia Ballester dice
Me gustaría que me recomendaseis un libro de autoayuda o algo así para el tema de estar siempre a la defensiva y mejorar la autoestima
Jennifer Delgado dice
Hola Virginia,
Te dejo una lista con los que creo, son mejores libros de autoayuda.
También puedes leer La muerte del caballo alado que quizás es algo más similar a lo que buscas.
Buena lectura!
Unknown dice
Hola. Estoy leyendo este comentario sobre las personas que están a la defensiva,pues yo no se bien como afrontar esto,yo en algunos momentos me siento a la defensiva,tras de recibir un barapalo, de quienes tu les estas o les has ayudado, con una forma positiva, y de buenas a primeras te das cuenta que esa persona no se merece nada,a si pues me pongo a la defensiva con esa persona.
Jennifer Delgado dice
Hola,
Después de recibir un golpe, es normal que nos pongamos a la defensiva. Es un mecanismo de defensa para protegernos.
El problema es cuando siempre estamos a la defensiva y no dejamos que nadie se nos acerque.
Sra González dice
Creo que es mejor ser precavidos y no permitir abusos. Me he llevado cada sorpresa ayudando a la gente y recibiendo a cambio tremenda ingratitud!
NAHOMI ALMANZAR dice
LA VERDAD ES QUE SOY UNA PERSONA QUE SIEMPRE ESTA A LA DEFENCIVA, Y CREANME NO ME A AYUDADO PARA NADA.
QUIERO CAMBIAR Y LO ESTOY INTENTANDO
Yoseli dice
Realmente siempre estoy a la defensiva ,y en muchas oportunidades mis respuestas son en tono retador o se puede decir grosero; en muchas oportunidades no me doy cuenta. Pero cuando lo hago eso me hace sentir súper mal. Justo hoy me dijeron algo que me dejó pensando y me hizo sentir mal. Me dijeron creo que la molestia siempre está latente en ti,pienso que si me hizo tanto ruido eso es porque es así. No es algo que hago por gusto es una reacción involuntaria. Necesito ayuda