Cuando se produce una separación de pareja, vivimos un auténtico duelo. No es solo la separación física sino el vacío emocional que deja, así como el cambio en las rutinas y la necesidad de reconfigurar tu futuro.
A menudo esa ruptura también se acompaña de un tsunami emocional. Es probable que no solo experimentes tristeza sino también estupefacción, dolor, ira, frustración o decepción. ¿Cómo lidiar con todo eso? ¿Cómo es posible seguir adelante? ¿Cómo reanudar una vida normal y volver a ser feliz?
¿Cómo afrontar una separación de pareja sin morir en el intento?
Es probable que alguna vez hayas escuchado la frase «el tiempo lo cura todo». Es cierto, sobre todo en materia de relaciones. Cuando acabas de romper, puedes sentir que ese dolor nunca pasará, pero se va aliviando a medida que pasan los días. Obviamente, también puedes cuidar de ti mientras eso pasa, de manera que puedas pasar página más rápido.
1. Date permiso para llorar
El fin de una relación a menudo implica sumergirse en un proceso de duelo, de manera que si no quieres terminar con un duelo no elaborado, será mejor que te permitas expresar tu dolor y sufrimiento. No tienes que aparentar ser fuerte – o al menos no ahora.
Llorar es una forma para liberar todas esas emociones que se fueron acumulando durante las últimas etapas de la relación. Tiene un efecto catártico, por lo que te ayudará a aliviar la carga emocional y te sentirás más aliviado.
Muchas personas intentan evitar el dolor buscando distracciones o incluso buscando otra relación para llenar el vacío, pero la mejor manera de lidiar con esas emociones es afrontarlas, simple y llanamente.
No ignores ni intentes reprimir los sentimientos y emociones totalmente normales que genera una ruptura. De hecho, llorar también puede ayudarte a conectar contigo mismo y tus necesidades emocionales en un momento de vulnerabilidad. Te brinda la oportunidad de reflexionar sobre lo que has perdido y lo que necesitas para sanar y seguir adelante.
2. Aprende la lección
Para afrontar una separación de pareja, también es importante reflexionar sobre lo que has aprendido. Ya sea positivo o negativo, siempre podemos aprender algo. Concéntrate en lo que has aprendido sobre ti, por ejemplo, o lo que has podido entender de las relaciones, de esa forma no volverás a cometer los mismos errores y podrás afrontar tu próxima relación con una actitud más madura.
De hecho, puedes preguntarte ¿cuáles son los beneficios? Sí, puede parecer descabellado, pero centrarte en los beneficios puede ayudarte muchísimo a superar esta etapa. Ya se trate de ese aprendizaje, una lección valiosa o simplemente darte cuenta de que necesitas más tiempo para enfocarte en ti para hacer las cosas que más te gustan o volverte más independiente.
3. Practica la gratitud
La gratitud puede ser una herramienta poderosa para superar una ruptura de pareja y pasar página. Te ayudará a enfocarte en lo positivo de tu vida, incluso en medio del dolor por la separación. Cuando reflexionas sobre las cosas buenas que aún tienes, puedes desarrollar una perspectiva más positiva sobre el futuro y ver la ruptura como una oportunidad para crecer y replantearte tu vida.
Además, esta practica puede ayudarte a encontrar un sentido a lo ocurrido, de manera que a veces puede actuar como una especie de «cierre emocional» con respecto a la relación. Te animará a pensar sobre los aspectos positivos de la relación y sentir gratitud por los buenos momentos compartidos, lo que puede facilitar la aceptación y, finalmente, dejar ir lo que no pudo ser.
En cualquier caso, recuerda que si ambos habéis decidido que la relación ha terminado, es mejor poner límites apropiados. No tiene sentido mantenerse con un pie dentro y otro fuera, prolongando la angustia y el sufrimiento.
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