Las personas deprimidas a menudo se sienten indefensas, sin esperanza, sin valor y creen que sus vidas están fuera de control. Sin duda, se trata de una condición compleja, que significa mucho más que simplemente “estar tristes” o sentir que la vida no tiene sentido. De hecho, se ha demostrado que algunas zonas del cerebro de estas personas están profundamente afectadas por la depresión y funcionan de manera diferente. Por eso, para ayudar a una persona deprimida, el primer paso es comprender realmente qué le sucede, entender cómo funciona su mente.
¿Qué sucede en la mente de la persona deprimida?
1. Incapacidad para establecer objetivos específicos
Las personas deprimidas tienen una tendencia a la sobregeneralización y a pensar de forma abstracta. Ejemplo de ellos son frases como «todo es lo mismo” o “ya nada me importa«. De hecho, un estudio realizado en la Universidad de Liverpool ha puesto de manifiesto que las personas deprimidas suelen plantearse objetivos de carácter más general y abstractos. Esto también significa que les resulta más difícil llevarlos a la práctica ya que sus metas no son muy precisas ni fácilmente cuantificables. De esta forma, es más probable que se vean atrapados en un círculo de ilusiones rotas y expectativas irreales.
2. Problemas de memoria
Uno de los síntomas menos conocidos de la depresión, pero también uno de los más negativos, son los problemas de memoria. Se ha podido apreciar que las personas que padecen depresión durante años, terminan desarrollando dificultades en la memoria declarativa, que es la que se encarga de recordar hechos específicos, como los nombres o los lugares. De hecho, un estudio particularmente interesante realizado en la Brigham Young University descubrió que las personas deprimidas pierden la capacidad para diferenciar las experiencias similares. Y es que la depresión desdibuja la memoria.
3. Dificultad para recordar los buenos tiempos
La mayoría de las personas no tienen dificultades para rememorar los buenos tiempos. De hecho, se trata de un recurso que podemos utilizar cuando estamos desmotivados, tristes o melancólicos. Sin embargo, esta tarea puede ser complicada para las personas deprimidas ya que suelen centrarse en las dificultades y hechos negativos, más que en los buenos momentos. Esto se debe al hecho de que los pensamientos depresivos, cuando se dejan libres, simplemente atraen otras ideas depresivas, formando un círculo vicioso de negatividad del cual es difícil salir.
4. Realismo depresivo
Un estudio particularmente interesante realizado en la Kent State University desveló un hecho sorprendente: las personas deprimidas tienen una visión más realista del mundo. De hecho, el resto de las personas sufren una especie de “optimismo adaptativo”, el cual les permite ver la vida desde un prisma más positivo. Sin embargo, las personas deprimidas no tienen ese prisma por lo que pueden evaluar su propio desempeño con mayor precisión e incluso son capaces de prever con mayor fiabilidad algunas situaciones del futuro. Sin embargo, lo que a primera vista puede parecer un don, en realidad les sume aún más en la depresión.
5. Más dolor físico
Para colmo de males, cuando una persona está deprimida, experimenta un nivel mayor de dolor físico. Así lo comprobó un experimento realizado por investigadores de la Universidad de Oxford. En el estudio se pudo apreciar que cuando se provocaba un estado de ánimo negativo, marcado por la tristeza, el cerebro de las personas reaccionaban con mayor intensidad ante el dolor y ellos mismos reconocían que encontraban estos estímulos más desagradables y más difíciles de soportar.
Fuentes:
Dickson, J. M. & Moberly, N. J. (2013) Reduced Specificity of Personal Goals and Explanations for Goal Attainment in Major Depression. PlosOne; 8(5).
Shelton, D. J. & Brock, C. (2013) A possible negative influence of depression on the ability to overcome memory interference. Behavioural Brain Research; 256(1): 20–26.
Moore, M. T. & Fresco, D. M. (2012) Depressive realism: A meta-analytic review. Clinical Psychology Review; 32(6): 496–509.
Berna, C. et. Al. (2010) Induction of Depressed Mood Disrupts Emotion Regulation Neurocircuitry and Enhances Pain Unpleasantness. Biol Psychiatry; 67(11):1083-1090.
Aldai Zarate dice
Muchas gracias por toda la información, me ha sido de gran ayuda… entre aquí buscando información para preparar una clase que mi profesora de psicología me dejo por tarea y e descubierto que estoy deprimido y lo peor de todo es la memoria, es aun mas deprimente saber que no puedes recordar cosas.