
Si bien la imagen que inmediatamente vendrá a nuestras mentes cuando se habla de morir de amor son Romeo y Julieta, quizás la desechemos por parecernos inverosímil. No obstante, la pareja existió realmente e incluso hoy la casa de Julieta es un bastión del amor donde se acumulan personas de todo el mundo cada 14 de febrero.
Salvando las licencias literarias de la obra de Shakespeare los investigadores de la Escuela de Medicina de Sydney han concluido que morir de amor es mucho más frecuente de lo que podemos imaginar. Al analizar las experiencias de ochenta adultos que habían sufrido la pérdida de un ser querido en fechas recientes observaron que eran más susceptibles a padecer trastornos cardíacos que aquellos que habían tenido estabilidad emocional durante el mismo periodo de tiempo.
El equipo concluyó que las alteraciones de orden emocional afectan seriamente al organismo de las personas produciendo cambios como: el incremento en la presión arterial, la alteración del ritmo cardíaco y la disminución de la fortaleza del sistema inmunológico. Este estado de duelo como consecuencia de la pérdida del ser querido,caracterizado por la depresión, la ansiedad y la ira, termina aproximadamente a los seis meses pero para ese momento una parte de los viudos ha muerto o ha desarrollado una enfermedad cardiaca.
El “Síndrome del corazón roto”, como se le ha llamado popularmente a esta reacción ante la pérdida de la pareja genera síntomas similares a los que se padecen antes de sufrir un ataque al miocardio. Aunque el nombre científico es Síndrome de Tako Tsubo y en esencia es una cardiomiopatía de etiología mucho más amplia y caracterizada por una disfunción sistólica del ventrículo izquierdo de carácter transitorio y a veces grave que se acompaña de dolor torácico y dispnea. Usualmente viene precedida de un violento estrés psíquico o físico y es más común entre el género femenino.
Lo cierto es que vivenciar un estrés mantenido con estrategias de afrontamiento inadecuadas matizadas por la ira y la irritabilidad aumentan las probabilidades de sufrir enfermedades cardiovasculares y cerebrovasculares. Así, cada vez más se evidencia la necesidad de desarrollar la resiliencia y cambiar nuestra forma de comprender el mundo acercándonos a visiones que asuman los cambios como parte esencial de la vida.
Fuentes:
O’Shaughnessy, J. (2009, Septiembre) Study shows link between bereavement and heart attack. En: https://www.usyd.edu.au/news/84.html?newsstoryid=3859
Venkatesan, V. et Al. (2009) Clinical Characteristics of Tako-Tsubo Cardiomyopathy. American Journal of Cardiology, 104(4): 578-582.
Frattini, P. et Al. (2006) La cardiomiopatia tako-tsubo: un caso clinico che simula una sindrome coronarica acuta. Cardiologia ambulatoriale;3:124-131.
Anónimo dice
¡ Hola ! muy interesante tu página!deseo hacerte una pregunta, cómo llaman los psicólogos el hecho de que una persona común y corriente, un porcentaje del día crea una novela en su mente, acerca de por ejemplo, alguien que le gusta, , y luego la continúa en la noche o al día siguiente, durando semanas, hasta que la "ilusión" por esa persona desaparece porque "aparece" otra. ¿ eso es idealismo diario ? ¿ enfermedad? vi en un canal de tv que una señora hacia historias en su mente para escapar de los malos recuerdos de sus experiencias de niña al punto que a los cuarentitanto años ella tenia 2 personalidades y la internaron.
Gracias por tu respuesta y espero toques el tema, ¡¡saludos!!
Jennifer Delgado Suarez dice
Inventar historias no siempre es sinónimo de enfermedad mental. Gracias por proponerme el tema, ya lo tenía en el tintero solo que ahora me has impulsado a terminarlo, puedes leerlo en: http://rincon-psicologia.blogspot.com/2009/10/inventarse-historias-un-trastorno.html
Y sobre las personalidades múltiples puedes leer en:
http://rincon-psicologia.blogspot.com/2009/10/existe-la-personalidad-multiple.html
Espero ambos artículos sacien tus dudas.