“Cuanto más violenta es una tormenta, más rápido pasa”, escribió Paulo Coelho. El actor Christopher Reeve también se sumó a esa ola optimista cuando dijo “una vez que has elegido la esperanza, todo es posible”. Por desgracia, el mundo no sigue los derroteros que marcan muchas de las frases para dar ánimo más populares.
A veces, las peores tormentas se extienden durante meses o incluso años. Y muchas veces la esperanza no es suficiente para lograr lo que nos proponemos. Por tanto, muchas de esas frases para dar ánimo y fuerza en realidad destilan un optimismo tóxico que termina generando el efecto opuesto al que se desea; o sea, hunden más a la persona.
El justo punto medio
Las afirmaciones positivas tienen un enorme poder. No cabe dudas. Un estudio realizado en el Instituto de Psicología de Beijing, por ejemplo, comprobó que pueden proporcionarnos una gran tranquilidad y seguridad para seguir adelante con nuestros planes o afrontar la adversidad.
Sin embargo, otro grupo de psicólogos de la Universidad de Bath demostró que una actitud excesivamente optimista también puede empujarnos a tomar malas decisiones en la vida. La sobredosis de pensamiento positivo disminuye nuestra capacidad para pensar de manera objetiva y pragmática, haciendo que asumamos más riesgos.
La aparente discrepancia se debe a que nuestro cerebro no se deja engañar tan fácilmente. Repetirnos que todo va bien cuando todo va mal, no será de gran ayuda. De hecho, es probable que nos haga sentir peor ya que estamos forzándonos a desarrollar una perspectiva que no es natural ni adaptativa.
En este sentido, neurocientíficos de la Universidad de Michigan comprobaron que cuando algunas personas se sienten muy estresadas o preocupadas, el intento de pensar positivo tiene un efecto paradójico: mientras su cerebro intenta buscar frases para darse ánimos, aumentan las emociones negativas que experimentan.
Eso no significa que no debamos intentar mantener una actitud más positiva ante la adversidad, sino que debemos deshacernos del optimismo ingenuo y abrazar un enfoque más pragmático y adaptativo que realmente pueda ayudarnos a enfrentar la situación en la que nos encontramos o pueda ser de utilidad para otras personas. Como siempre, en el equilibrio está la clave.
Es mejor decir: «sé que podrás encontrar la fuerza para salir de esto» que afirmar: «todo irá bien«. Es preferible decirle a alguien: «sé que lo estás pasando mal, pero con el tiempo tu herida sanará» a «no te preocupes, anímate«.
Las mejores frases para dar ánimo y fuerza – de verdad
1. “La esperanza es la capacidad de ver que hay luz a pesar de toda la oscuridad” – Desmond Tutu
Cuando tocamos fondo emocionalmente, es difícil recuperarse. Sin embargo, podemos seguir adelante si somos capaces de vislumbrar al menos una parte del camino. La esperanza es vital para seguir luchando, así que necesitamos fomentarla para no darnos por vencidos.
2. “Nadie puede volver atrás y tener un nuevo comienzo, pero todos podemos empezar desde ahora y tener un nuevo final” – James R. Sherman
La culpa y el arrepentimiento son algunos de los lastres que solemos llevar en nuestra mochila de la vida. No obstante, si queremos dar ánimos a una persona, podemos recordarle que aunque no puede cambiar su pasado, tiene el poder de ir transformando su presente para dar forma a su futuro.
3. “Deja que tus esperanzas, no tus heridas, den forma a tu futuro” – Robert H. Schuller
La vida golpea a todos. Al respecto, Ernest Hemingway escribió: “el mundo rompe a todos, y después, algunos son fuertes en los lugares rotos”. No podemos obviar esas heridas, pero podemos trabajar para que sanen e impedir que arruinen nuestro futuro.
4. “Cuando una puerta se cierra, otra se abre; pero a menudo miramos tanto y con tanta pena la puerta cerrada, que no vemos las que se abren para nosotros” – Alexander Graham Bell
Muchos lo conocen por su trabajo con el teléfono, pero pocos saben que durante unos años Bell también ayudó a personas sordomudas. Esta frase para dar ánimos y fuerza nos motiva a mirar hacia delante para descubrir esas nuevas oportunidades que están aguardándonos o pueden aparecer y que a menudo no aprovechamos porque estamos paralizados, lamentándonos por el fracaso anterior.
5. “Comienza donde estás. Usa lo que tienes. Haz lo que puedas” – Arthur Ashe
Este gran tenista estadounidense, el único jugador afroamericano que ha ganado los campeonatos de Wimbledon, el Abierto de Estados Unidos y el Abierto de Australia en singles, nos dejó una de las mejores frases para dar ánimos. No tenemos que esperar las condiciones perfectas, podemos empezar ahora mismo con las herramientas que tenemos dando el máximo de nosotros. Eso será más que suficiente.
6. “La persona que tiene una razón para vivir puede soportar cualquier cosa” – Viktor Frankl
Este psiquiatra, que sobrevivió tres años a varios campos de concentración nazis, incluidos Auschwitz y Dachau, veía todos los días como muchos de sus compañeros se rendían. Entonces se dio cuenta que aquellos que tenían más probabilidades de sobrevivir eran quienes tenían un significado vital y se aferraban a él. En los tiempos oscuros, es importante encontrar ese motivo y atesorarlo como una tabla de salvación.
7. “Al final del día, podemos soportar mucho más de lo que creemos” – Frida Kahlo
La pintora mexicana, que padeció durante gran parte de su vida unos dolores atroces debido al grave accidente que sufrió y las varias operaciones a las que tuvo que someterse, es un ejemplo de resiliencia. De hecho, los NAVY Seal se rigen por la “regla del 40%”, que dice que somos capaces de soportar mucho más de lo que pensamos y que cuando nuestra mente nos dice “basta”, en realidad solo hemos llegado al 40% de nuestra capacidad, por lo que aún podemos seguir recorriendo un buen trecho.
8. “La vida es una sucesión de lecciones que deben ser vividas para ser entendidas” – Helen Keller
Arrebatada la visión y la audición cuando tenía tan solo 1 año y medio, Helen Keller se convirtió en una famosa activista y escritora, por lo que sus frases para dar ánimos se revisten de ese conocimiento esencial que brinda la adversidad. Keller nos enseñó que, por muy terrible que parezca una experiencia, hay que vivirla para poder comprenderla y superarla. Nos conmina a no huir de ella sino a zambullirnos en lo que nos ocurre para sacar una enseñanza vital porque la aceptación es terreno fértil para el crecimiento.
9. “Cada lágrima nos enseña una verdad” – Platón
“Ningún mar en calma hizo experto a un marinero” dice un antiguo proverbio. No aprendemos a ser resilientes en las buenas épocas sino cuando debemos lidiar con la adversidad. Por tanto, si bien es cierto que a nadie le apetece sufrir, muchas veces ese problema encierra una valiosa lección de vida que podemos aprender.
10. “Puedo resumir todo lo que he aprendido en la vida en tres palabras: sigue hacia delante” – Robert Frost
Antes o después, todo pasa. Solo necesitamos seguir adelante, como mejor podamos. La fuerza para seguir avanzando es lo que irá curando las heridas emocionales y nos presentará nuevas oportunidades. Debemos asegurarnos de no quedarnos paralizados en la angustia y el sufrimiento.
Referencias Bibliográficas:
Dawson, C. (2023) Looking on the (B)right Side of Life: Cognitive Ability and Miscalibrated Financial Expectations. Personality and Social Psychology Bulletin; 10.1177.
Gu, R. et. Al. (2019) Self-affirmation enhances the processing of uncertainty: An event-related potential study. Cognitive, Affective, & Behavioral Neuroscience; 19: 327–337.
Moser, J. S. et. Al. (2014) Neural markers of positive reappraisal and their associations with trait reappraisal and worry. Journal of Abnormal Psychology; 123(1): 91-105.
Ruth Diaz dice
Me encantó este artículo que mueve a pensar acerca de tantos textos sobre consejos y recetas de vida que tienden a dar respuestas simplistas a cuestiones complejas.
Me gustaría que alguna vez se abordara la disonancia cognitiva.
¡Saludos!
Jennifer Delgado dice
Hola Ruth,
Me alegra que te haya gustado. Tienes razón, he mencionado mucho la disonancia cognitiva pero creo que nunca le he dedicado un artículo entero – y lo amerita. Me lo apunto y en los próximos días sacaré algo.