Aunque los investigadores no explican el por qué de este fenómeno su causa puede hallarse en los mecanismos más instintivos relacionados con el reconocimiento de las situaciones y emociones relacionadas con el peligro, la angustia y los sentimientos dolorosos. Las personas serían portadoras de una especie de sensor especial para detectar las emociones relacionadas con el miedo y el dolor, como parte de un mecanismo casi innato de sobrevivencia. Así, se validaría el modelo explicativo de Potter, Staub e O’Connor que se basan en el principio de la competición entre estímulos durante los primeros estadíos de elaboración. Así, la atención parpadeante borraría el segundo estímulo siempre que el segundo no sea más significativo, sobre todo desde el punto de vista emocional.
Maratos, F., Mogg, K., & Bradley, B. (2008). Identification of angry faces in the attentional blink. Cognition & Emotion, 22 (7), 1340-1352.
Sessa, P. & Dell’Acqua, R. (2008) Il fenomeno “attentional blink”. Giornale italiano di Psicologia; 43(3): 539-560.
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