Los adolescentes desarrollan depresión de manera bastante similar a los adultos, pero suelen experimentar sus emociones de manera más intensa y con mayor volatilidad. Por supuesto, es normal que de vez en cuando se sientan tristes por un problema en sus relaciones o por el mal resultado en un examen. Pero si se sienten tristes durante semanas o incluso meses sin ninguna razón en particular, puede ser un signo de una depresión sin diagnosticar.
La depresión en adolescentes es un problema grave , pero se puede evitar cuando se conocen los síntomas. Aunque el término «depresión» puede describir una emoción normal, también puede referirse a un trastorno mental. La enfermedad depresiva en adolescentes se detecta cuando los síntomas persisten e interfieren con la capacidad del adolescente para realizar sus tareas cotidianas.
¿Qué causa la depresión en los adolescentes?
La depresión es un trastorno bastante común en los adolescentes e incluso en los niños más pequeños. Se estima que alrededor del 5% de los niños y adolescentes padecen depresión. Los adolescentes en situaciones de estrés, que sufren una pérdida o que tienen déficit de atención, problemas de aprendizaje o conducta, así como trastornos de ansiedad, tienen un mayor riesgo de desarrollar depresión.
También se conoce que los adolescentes que pertenecen a grupos minoritarios tienen un riesgo particularmente elevado. Los adolescentes con depresión a menudo tienen problemas en casa. En muchos casos, los padres también sufren depresión ya que este trastorno tiene un trasfondo familiar.
¿Cuáles son los síntomas de la depresión en la adolescencia?
Es importante recordar que el comportamiento de los adolescentes con depresión puede diferir del de los adultos. Sin embargo, algunos de los síntomas más comunes son:
- Tristeza frecuente y llanto
Los adolescentes pueden mostrar su tristeza usando ropa de color negro, escribiendo poesía con temas mórbidos o escuchar temas musicales nihilistas. También pueden llorar sin razón aparente.
- Desesperación
Los adolescentes pueden sentir que la vida no vale la pena o incluso sentirse demasiado cansados como para preocuparse por su apariencia e higiene. Pueden llegar a ser muy pesimistas sobre su futuro, pensando que esa situación negativa no cambiará nunca.
- Anhedonia
Los adolescentes pueden volverse apáticos y abandonar las actividades que antes disfrutaban. Pierden la capacidad para disfrutar de sus amigos, los deportes y en sentido general cualquier pasatiempo que antes los llenaba.
- Aburrimiento persistente y falta de energía
La falta de motivación y el nivel de energía baja es prácticamente una constante en la depresión en los adolescentes. Por ese motivo, a menudo no van a clases, lo cual provoca una caída en sus calificaciones, que viene acentuada por la pérdida de concentración y la lentitud del pensamiento.
- Aislamiento social y falta de comunicación
Hay una falta de conexión con amigos y familiares. Los adolescentes pueden evitar las reuniones y eventos familiares. Además, si solían pasar mucho tiempo con sus amigos, ahora pueden pasar la mayor parte de su tiempo solos, encerrados en su habitación, lo cual se debe, en gran parte, a que sienten que no pueden compartir sus sentimientos con los demás ya que nadie les comprende.
- Autoestima baja y sentimientos de culpabilidad
Los adolescentes deprimidos pueden asumir la culpa por eventos o circunstancias negativas. Pueden sentirse como un fracaso y culparse por lo que ocurre, desarrollando opiniones negativas sobre su competencia. Es probable que sientan que no son lo suficientemente buenos, por lo que su autoestima se resiente.
- Aumento de la irritabilidad, ira u hostilidad
Los adolescentes deprimidos a menudo se muestran irritables, por lo que canalizan la mayor parte de su enojo hacia su familia. Pueden ser muy críticos, sarcásticos o incluso abusivos. Es probable que en el fondo, sientan que deben rechazar a su familia antes de que su familia los rechace ya que se sienten indignos de ser amados.
- Dificultad en las relaciones interpersonales
Los adolescentes pueden perder de repente el interés por sus amistades. Dejan de conectar y quedar con sus amigos. Además, la pérdida de interés por las actividades y la irritabilidad pueden convertirse en fuentes de conflicto que los alejan aún más de sus coetáneos.
- Síntomas físicos frecuentes
La depresión en la adolescencia puede acompañarse de muchos síntomas físicos, desde los dolores de cabeza y problemas gastrointestinales hasta mareos o desmayos. Esos signos son una somatización de su malestar emocional.
- Falta de concentración
Los adolescentes con depresión suelen tener problemas para concentrarse en las tareas escolares o incluso para seguirle el hilo a una conversación o ver la televisión. Además, suelen tener enlentecimiento del pensamiento, por lo que les cuesta aún más conectar con el mundo.
- Cambio importante en los patrones de alimentación o sueño
Los trastornos del sueño puede aparecer junto a la depresión en la adolescencia. Por tanto, pueden quedarse viendo la televisión toda la noche o pasarse gran parte del día durmiendo. La pérdida del apetito puede llegar a convertirse en anorexia, aunque también hay quienes reaccionan con el patrón opuesto y comen demasiado ya que la comida se convierte en una manera de exorcizar su malestar emocional.
- Autolesiones e ideas suicidas
Los adolescentes deprimidos pueden decir cosas como que preferirían estar muertos ya que no creen que puedan mejorar. Como tienen dificultades para expresar sus sentimientos, a menudo pueden canalizar esa tensión emocional, malestar físico, dolor y baja autoestima a través de conductas autolesivas como los cortes, generalmente en zonas ocultas a la vista, como los muslos y antebrazos.
En cualquier caso, recuerda que la depresión en los adolescentes tiene tratamiento. Cuando antes pidas ayuda psicológica, mejor ya que menos instaurado estará el trastorno y más eficaz será la terapia.
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