Los siete estudios psicológicos más aplicables del 2009

Con esa tendencia que todos tenemos a hacer listas y resúmenes cada vez que llega un fin de año, el Rincón de la Psicología a modo de regalo de despedida del 2009 les presenta algunos de los estudios en el área de las Ciencias Psicológicas que he considerado son los más interesantes y aplicables. Algunos de ellos ya los he reseñado con anterioridad, otros son totalmente nuevos.

1. Si debes escoger entre comprar algo o gastar el dinero en una experiencia memorable, ¿qué opción te resultaría más atrayente? Según un estudio desarrollado en la Universidad de San Francisco que envolvió a 154 personas, las cosas que tenemos (las posesiones materiales) nunca nos harán tan felices como las cosas que hacemos. La razón es muy sencilla: nos adaptamos a las cosas materiales en cuestión de días o semanas por lo que la sensación de felicidad resulta muy efímera, no importa cuán importantes hayan sido para nosotros. Sin embargo, las experiencias son posesiones invaluables debido a una causa esencial: nos reportan sensaciones muy satisfactorias que se hacen cada vez más placenteras en tanto nuestra memoria las modifica para convertirnos en personas aún más felices.

2. No hay una segunda oportunidad para causar una primera buena impresión. Así dice un refrán popular y así lo confirman los resultados de la investigación desarrollada en el Departamento de Psicología de la Universidad de Nueva York que identificó dos áreas del cerebro que muestran una actividad significativa durante ese primer encuentro en las relaciones interpersonales. En concreto, las áreas que muestran una mayor activación para conformar esta primera impresión son: la amígdala y la corteza cingulada. Ambas están relacionadas con el aprendizaje emocional y la confianza; de esta manera, durante esos primeros minutos nuestro cerebro trabaja con las áreas más antiguas evaluando la compatibilidad emocional con nuestro interlocutor y valorando la confianza que nos inspira esa posible nueva relación.

3. Los video juegos puede prevenir el estrés postraumático. El estudio desarrollado en la Universidad de Oxford afirma que jugar al Tetris en el lapso de las seis horas posteriores a una situación particularmente estresante podría actuar como una vacuna contra los recuerdos traumáticos en tanto impide la consolidación del recuerdo como una experiencia negativa.

4. ¿Quieres conocer la verdad en una conversación? No imites. El estudio desarrollado en la Universidad de Leiden parte de la idea de que todos imitamos algunos gestos y expresiones mientras conversamos. De hecho, cuando nos estamos comunicando tendemos a imitar las posturas y movimientos de nuestro interlocutor desarrollando una especie de danza recíproca. Curiosamente, las personas que más imitan los movimientos de su interlocutor son menos capaces de detectar las mentiras mientras que aquellos que se mantienen en sus posturas y gestos son más hábiles para detectar las falsedades. La razón es muy simple: cuando comenzamos a imitar los movimientos de nuestro interlocutor es porque ya confiamos en él.

5. Más dinero nos hace más felices aunque nuestro nuestro poder adquisitivo no haya aumentado realmente. Esta curiosa afirmación proviene de un experimento desarrollado en la Universidad de California donde se observó que las personas se alegran si su salario aumenta independientemente de que su nivel adquisitivo realmente haya disminuido porque los precios de los productos han aumentado. Esta falsa percepción de solvencia económica ha sido denominada “ilusión del dinero” y lo más curioso es que este efecto se hace más fuerte mientras mayor sea la suma de dinero que se obtiene aunque objetivamente su poder adquisitivo no aumente. Esta “incapacidad” para valorar con objetividad su situación se sustenta en la activación de áreas como la corteza prefrontal ventromedial, relacionada con el procesamiento y la anticipación de recompensas.

6. Pensar en la persona amada reduce la sensación de dolor. El estudio implementado con 25 personas en la UCLA afirma que el solo hecho de ver una fotografía de la persona amada o sostener su mano reduce considerablemente las sensaciones dolorosas disminuyendo nuestra sensibilidad ante los estímulos molestos.

7. ¿Quieres mejorar tu memoria? A dormir. La investigación desarrollada en la Universidad de Michigan mostró que los estudiantes que hacen sus deberes en la noche y posteriormente duermen, tienden a cometer menos errores de memoria y logran recordar mucho más contenido. La explicación es muy simple: el sueño fortalece en nuestra mente las últimas experiencias que hemos tenido durante el día, mientras que si permanecemos despiertos y sometidos al bombardeo de información tendremos más posibilidad de olvidar aquello que nos ha sucedido en horas tempranas.

En resumen, que la Psicología este año ha intentando acercar sus laboratorios a la realidad cotidiana en la búsqueda de resultados que no solo fuesen aplicables a nivel científico sino también a nuestra vida diaria. Aplicarlos es una decisión personal.