¿Quién no quisiera borrar los malos recuerdos o miedos que atormentan su existencia? En uno de los primeros artículos: La raíz inconsciente del sufrimiento y la depresión ya realicé una pequeña mención al intento de la humanidad de eliminar por vías químicas el sufrimiento. Ahora esta idea parece cada vez más cercana o al menos así lo afirman algunos investigadores de la Universidad de Ámsterdam que desarrollan en sus laboratorios una píldora basada en propranolol (de la familia de los bloqueantes beta) que también es capaz de bloquear los malos pensamientos o recuerdos. Aunque la idea anda rondando desde el 2005 en la Universidad de Cornell de Nueva York donde las investigaciones con éxito solo se habían llevado a cabo en ratas.
Posteriormente investigadores de la Universidad de McGill en Montreal desarrollaron el mismo experimento en humanos con resultados positivos aunque puntualizan que lo que se borra no es el recuerdo sino la respuesta emocional ante el mismo. En otras palabras, el recuerdo del hecho traumático se convertiría en una memoria sin ninguna repercusión emocional. Por supuesto, este descubrimiento sería altamente efectivo para las personas que sufren estrés postraumático.
Ahora los investigadores holandeses han desarrollado sus correspondientes experimentos con 40 personas y los resultados fueron positivos si bien no pueden especificar por cuánto tiempo se mantendrá esta respuesta positiva ante el hecho traumático.
¿Cuánto hay de cierto en estas investigaciones? ¿Es posible desarrollar una píldora para borrar los recuerdos particularmente dolorosos o estresantes?
No se puede ser rotundos en nuestras afirmaciones porque el futuro puede depararnos muchas sorpresas pero hasta el momento una dosis de propranolol solo contribuye a controlar la reacción de miedo o las respuestas emocionales negativas que provoca el recuerdo de una situación traumática. Esto quiere decir que el recuerdo no se borra o desaparece sino que nuestra reacción ante el mismo cambia, se bloquean las reacciones de miedo por lo cual su efecto podría extenderse a cualquier otro comportamiento o situación en la cual esté inmersa la persona y quizás podría provocar un efecto similar al de la insensibilidad ante el dolor.
El mejor de sus usos podría estar relacionado con el tratamiento de las fobias ya que durante el periodo de terapia la persona podría acercarse al objeto o a la situación temida y así eliminar el miedo paralizante y los ataques de pánico que muchas veces impiden continuar con la desensibilización.
No obstante, antes de lanzarse en esta carrera varias preguntas éticas deberían plantearse: ¿Bastaría una dosis o las personas que sufren estrés postraumático tendrían que convertirse en dependientes de este nuevo medicamento? Si disminuye nuestras respuestas emocionales ante una situación específica, ¿podríamos estar seguros de que la persona no disminuirá su respuesta emocional ante el resto de las situaciones convirtiéndose en un “happy puppet”?
Nuevas preguntas y decisiones ante las cuales nos ubica el desarrollo tecnológico.
Fuentes:
Kindt, M.; Soeter, M. & Vervliet, B. (2009) Beyond extinction: erasing human fear responses and preventing the return of fear. Nature Neuroscience 12: 256 – 258.
El fin de los malos recuerdos (2007, julio) BBC Mundo Ciencia. En: https://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_6260000/6260820.stm
Fármaco para borrar recuerdos (2005, julio) BBC Mundo Ciencia. En: https://news.bbc.co.uk/hi/spanish/science/newsid_4725000/4725441.stm
José Luis Gonzalo Marrodán. dice
La calidad de la información que nos transmites es altísima, Jennifer, basándote en fuentes actuales e investigaciones recientes. Es una suerte poder leer tus artículos para poder estar a la última, algo que muchas veces no podemos hacer.
Repecto al artículo, comentar que me ha sorprendido porque no sabía nada de que se estuviese investigando sobre medicación en este sentido. El tema del trauma es uno de mis favoritos y me ha servido para aprender sobre psicofarmacología en este ámbito.
No sé si he entendido mal, Jennifer, pero creo que ¿este fármaco actuaría como determinadas técnicas psicoterapéuticas como la exposición o la desensibilización a determinada sintomatología sólo que el paciente no debe pasar por el proceso de exponerse? ¿O atenuaría ese proceso de afrontamiento? ¿Combinando ambas terapias (el fármaco + las técnicas) es posible que el paciente obtenga mejores resultados? Así lo intuyo yo.
Felicitaciones,
José Luis
Jennifer Delgado Suarez dice
José Luis, en un principio las investigaciones se han llevado a cabo en personas con miedo a las arañas y en personas con estrés postraumático. Los resultados han sido positivos pero no se especifica qué tiempo dura el efecto, como es una investigación joven aún quedan muchos aspectos por deslindar.
La idea de combinar esta píldora con los tratamientos psicológicos es mia porque considero que de esta forma, trabajando tanto el aspecto psicológico del miedo o del trauma como el aspecto fisiológico, se obtendría una terapia más efectiva con el consecuente beneficio para el paciente. Con la píldora debilitariamos las defensas iniciales tan dicíciles de vencer en los traumas y fobias y posteriormente evitariamos una posible adicción a través del tratamiento psicológico.
Gracias por tus comentarios, siempre enriquecen los artículos y me brindan aliento para seguir escribiendo.
Es un placer contar con lectores como tú.