En los últimos meses los problemas económicos relacionados con la crisis han hecho que muchas personas asuman posiciones extremistas que probablemente en otras situaciones jamás habrían aprobado. ¿Por qué sucede esto?
La razón es muy sencilla: cuando no sabemos qué hacer y experimentamos incertidumbre sobre el curso de nuestra vida, mostramos una tendencia a simpatizar con las posiciones más extremas. Así lo demostró un curioso estudio desarrollado en la Universidad de Claremont.
Según este experimento los grupos extremistas le proporcionan a las personas con incertidumbre las creencias fuertes que necesitan en esos momentos de crisis para construir su identidad y darle un sentido al mundo que gira a su alrededor.
Los psicólogos le pidieron a un grupo de 82 estudiantes que escribieran varios temas sobre los cuales se sintieran inseguros o tuvieran dudas; de esta forma se creaba un priming de incerteza. A continuación se les preguntó si apoyarían una serie de medidas y grupos muy radicales que asumían posiciones extremas para cambiar algunos aspectos en la dirección de la universidad.
Los resultados demostraron que los estudiantes en los cuales se había despertado el sentimiento de incertidumbre tendían a preferir las opciones más extremas antes que las soluciones de lucha intermedias. ¿Por qué sucede esto?
Los investigadores sugieren que los grupos u organizaciones extremas proyectan una imagen de “confianza” ya que generalmente siguen una línea muy clara de pensamiento y acción que les permite a las personas con incertidumbres vislumbrar un camino claro ante sí. En otras palabras, en un mar de incertidumbres, los grupos extremistas brindan una tabla de salvación que es percibida por las personas con dudas como más fuerte y con menos riesgos. Los grupos extremistas ofrecen una fuerte identidad y un gran sentido de pertenencia, precisamente lo que necesitan las personas con incertidumbre.
Por supuesto, más allá de las incertidumbres, adoptar posiciones extremas es una decisión que también está determinada por un pensamiento del tipo “blanco o negro”, que en muchas ocasiones conduce a la creación de falsos dilemas y, por ende, a soluciones extremas.
Obviamente, el hecho de que se pueda comprender por qué una persona se afilia a las creencias extremas no justifica sus acciones. De hecho, debemos aprender a lidiar con la incertidumbre desde una posición psicológicamente saludable porque el futuro depara siempre más dosis de dudas y menos certidumbres.
Además, también deberíamos reflexionar sobre el hecho de que detrás de los grupos extremistas en muchas ocasiones se encuentran personas que intentan manipular determinadas condiciones sociales para sacarles provecho a su favor.
Fuente:
Hogg, M. (2010) The solace of radicalism: Self-uncertainty and group identification in the face of threat. Journal of Experimental Social Psychology; 46(6): 1061-1066.
Akina dice
Interesante artículo que me ha hecho reflexionar sobre algo que generalmente no lo hago, donde estoy posicionada?
Por lo que voy a escribir imagino se puede sacar que soy de las que se decantan por lo extremo, no es así siempre, aunque en ocasiones sí y no me duele reconocerlo, se trata de elecciones en cada momento.
Hay situaciones extremas que crean una incertidumbre totalmente razonable. Hay temas sociales que las crean y son totalmente ciertas por repetitivas, porque es siempre más de lo mismo para los de siempre, desigualdades de género, laborales………
Quizás decantarse por un blanco o negro es más gratificante que por un blanco porque sí.
No sé si existe una posición psicologicamente razonable en muchos casos en los que nos sentimos con un mar de dudas y de incertidumbre,que crean urgencia a actuar , para ello hay que tener una fortaleza mental que no es lo más habitual, más si como se dice, es una situación extrema, mantener la mente clara es muy dificil y costoso y se llega al mismo sitio práctico generalmente.
Ciertas acciones no se justifican ni desde las creencias extremas ni desde las presumiblemente centradas.
Yo también reflexiono sobre el hecho de que tras los grupos "no extremistas" se esconden personas que intentan manipular igualmente a su favor. Gracias por las reflexiones!!!
Jennifer Delgado Suarez dice
Akina,
Creo que todos en algún que otro momento hemos asumido una postura extrema o un pensamiento del tipo "blanco o negro". Y el que esté libre de culpas que tire la primera piedra.
Hay situaciones en las que, como bien dices, se está contra la espada o la pared. No obstante, siempre debemos preguntarnos: ¿existirá una tercera opción?
Obviamente, cuando estamos tensos y confusos será difícil pensar con claridad pero a veces una simple pregunta puede cambiar nuestra decisión. Y realmente hay casos en que vale la pena.
Gracias a ti!