Los retratos de Rembrandt resaltan por su atractivo y veracidad. Cuando estamos frente a sus pinturas nos sentimos particularmente relajados, a pesar del fondo oscuro tan característico en los retratos de esa época. Pero… ¿qué misterio se esconde tras las pinturas de Rembrandt que la dotan de un encanto tan especial? Investigadores de la British Columbia University creen haber descubierto el secreto.
DiPaola, el investigador principal, afirma que Rembrandt utilizó técnicas pioneras que actuaban guiando la vista del espectador para generar una experiencia visual calmada y al mismo tiempo especial. Esta idea no es nueva, ya sabemos que muchos artistas del Renacimiento utilizaban diferentes técnicas para cautivar al espectador, muchas de las cuales provenían del más reciente conocimiento científico sobre la luz, la distribución espacial y las perspectivas.
Para determinar qué factores contribuyen de manera decisiva al toque mágico de los retratos de Rembrandt, DiPaola utilizó programas de representación por ordenador para recrear cuatro de los retratos más famosos del artista. A la misma vez, registró los movimientos de los ojos de los espectadores mientras examinaban las pinturas originales. ¿Qué sucedió?
Después de un rápido periplo por el retrato (con los consecuentes movimientos oculares rápidos), los espectadores usualmente se quedaban mirando por largo tiempo los ojos que aparecían en los retratos dando lugar a movimientos oculares más calmados. La transición entre los bordes agudos y borrosos (conocido en el «arte como bordes perdidos y encontrados») también atrajo la atención de los espectadores creando una suerte de narrativa a lo largo de todo el cuadro. Estos movimientos oculares más lentos y dirigidos serían la clave por la cual los cuadros de Rembrandt provocan tal fascinación y tranquilidad. También se conoce que los espectadores tienen una preferencia por pinturas que posean este tipo de “narrativa visual dirigida” antes que aquellas que sean simplemente un conjunto de detalles sobre una tela.
Aunque no soy especialista en artes plásticas, también me atrevería a afirmar que el énfasis en los ojos de sus pinturas es lo que nos lleva inmediatamente a comprender las emociones e incluso a hacernos una idea del perfil psicológico de la persona que está delineada. Esta idea la comparten algunos críticos de arte que han llegado a afirmar que Rembrandt fue un pintor de la esfera psicológica de las personas que intentaba inmortalizar.
Vale aclarar que este es el primer estudio que verifica científicamente las técnica de la “dirección de los ojos”, cuyo origen fue atribuido a Rembrandt aunque se desconoce si fue un puro azar intuitivo o fruto de una profunda meditación y estudio producto de que el artista sabía que los pintores miran de forma diferente. O quizás un intento del pintor de ponerle colores a la idea de que “el alma se lee a través de los ojos”…
Fuente:
DiPaola, S.; Riebe, S. & Enns, J. T. (2010) Rembrandt’s Textural Agency: A Shared Perspective in Visual Art and Science. Leonardo; 43 (2): 145- 151.
Carina Sampó, facilitadora de cambios, terapeuta psicodramatica dice
Hola Jennifer
Siempre me sorprende tu excepcional capacidad de escribir y trasmitir información tan compleja e interesante como la expresada aquí!
Gracias.
Anónimo dice
Genial el articulo! Siempre se aprende algo nuevo e interesante en el blog.
Jennifer Delgado Suarez dice
Hola Carina:
Como siempre, muchas gracias por tus palabras de aliento. Solo espero hacer llegar cada día a las personas un poco de lo que he aprendido del mundo, para mi tan maravilloso, de la Psicología.
Un saludo