La publicidad está por doquier, allí donde miremos hay un anuncio publicitario que nos intenta vender algo. Muchos hemos desarrollado una suerte de apatía que nos “desconecta” de estos anuncios pero lo cierto es que continuamos captando la información que nos transmiten, aunque no en un nivel consciente. Sin embargo, ahora investigadores de la Universidad de Colonia, en Alemania, han descubierto que si masticamos somos inmunes a la publicidad, o al menos a la que se transmite en los cines y la televisión.
Fuente:
Topolinski, S.; Lindner, S. & Freudenber, A. (2013) Popcorn in the cinema: Oral interference sabotages advertising effects. Journal of Consumer Psychology.
Deja una respuesta