El embarazo y el nacimiento del bebé son momentos bellísimos en la vida de toda mujer pero esto no implica que los mismos estén exentos de estrés y problemáticas. De hecho, en ocasiones para muchas mujeres es difícil enfrentar cambios tan drásticos. Esto no significa que quieran menos a sus bebés sino simplemente que tienen una forma diversa de enfrentar estos momentos ya que no cuentan con los recursos psicológicos necesarios.
Se conoce que la depresión postparto es bastante común entre las féminas e incluso hay algunos especialistas que afirman que la misma se debe a los grandes desbalances hormonales. No obstante, existe una problemática que va más allá: se trata de la psicosis puerperal.
La psicosis puerperal es una psicopatología de carácter grave que afecta aproximadamente a una de cada mil embarazadas después de dar a luz. Esta problemática tiene algunos puntos de contacto con el trastorno bipolar y puede presentarse con síntomas como: manía, depresión severa, alucinaciones, confusión y cambios drásticos de humor. Obviamente, también existe una pérdida de contacto con la realidad que en ocasiones pone en riesgo la vida del pequeño.
Si se echa un vistazo a la historia de la psiquiatría hallaremos que las alteraciones psicopatológicas ligadas al puerperio se han manifestado desde los comienzos de la historia médica. Por ejemplo, Hipócrates ya refiere la existencia de patología psicótica en mujeres en el puerperio y Sorano de Efeso en el lejano 100 d.C la define como una situación de “frenitis aguda” entendida como “enfermedad mental aguda, acompañada por fiebre aguda, movimientos sin sentido de las manos y pulso pequeño y pleno”.
Sin embargo, no es hasta el siglo XIX que los síntomas de la psicosis puerperal son adecuadamente delimitados. Así, estos son:
1. Rápidos cambios en el nivel de conciencia, perplejidad, desorientación con ocasionales intervalos lúcidos.
2. Un trastorno psicomotor que varía desde la agitación a una severa lentitud y estupor, con la correspondiente variación de la comunicación verbal, desde rápidas y ruidosas asociaciones hasta mutismo.
3. Trastornos afectivos con ansiedad, algunas veces alternando con felicidad extásica o problemas de la afectividad más estables, tales como la depresión y la manía.
4.- Alucinaciones y pseudoalucinaciones, además de falsas identificaciones e ilusiones.
5.- Delusiones con un típico contenido en relación con la maternidad.
6.- Fluctuación de todo el cuadro en el tiempo; el así llamado cuadro caleidoscópico.
En el caso de la psicosis puerperal generalmente se aprecia una historia familiar de trastornos psicóticos o una vivencia anterior en la propia persona. Curiosamente, una investigación desarrollada por científicos del Instituto Karolinska de Estocolmo halló que el riesgo de desarrollar una psicosis crece conforme aumenta la edad de las mujeres. Así, las féminas que sobrepasan los 35 años tienen el doble de probabilidades de presentar un cuadro psicótico que las mujeres más jóvenes. Ser madres primíparas también aumenta el riesgo.
No obstante, otra investigación desarrollada en Turquía en el año 1999 mostró que la mayoría de las mujeres que padecían la psicosis puerperal eran jóvenes y primíparas, tenían un bajo nivel educacional y vivían en zonas rurales. De ellas en más del 75% de los casos se apreciaron episodios psicóticos en los 11 años siguientes.
Como puede apreciarse, las causas de esta problemática aún no han sido desveladas si bien la teoría más aceptada es que en la mujer ya existe una historia de problemáticas psicológicas que, potenciadas por los desarreglos hormonales y el estrés producido por el cambio de vida, actúan como detonantes para la aparición del estado psicótico.
Fuentes:
Valdimarsdóttir, U. et. Al. (2009) Psychotic Illness in First-Time Mothers with No Previous Psychiatric Hospitalizations: A Population-Based Study. Plos Medicine.
Gómez Alcalde, M. S. (2002) Patología Psiquiátrica en el puerperio: Psicosis Puerperal. Revista de Neuro-Psiquiatría; 65: 32-46.
Allwood, C.W.; Berk, M. & Bodemer, W. (2000) An investigation into puerperal psychoses in black women admitted to Baragwanath Hospital. S Afr Med J; 90(5): 18-20.
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