Los hábitos son una parte esencial de nuestra vida cotidiana. Contribuyen a dar forma a nuestros comportamientos, actitudes y, en última instancia, a nuestras decisiones. Los hábitos que desarrollamos pueden ayudarnos a alcanzar nuestras metas o convertirse en un obstáculo para alcanzar nuestro máximo potencial. De hecho, los estudios demuestran que hasta el 40% de nuestras acciones diarias se basan en costumbres. Por tanto, desarrollar hábitos positivos es crucial para nuestro crecimiento personal y profesional.
Podemos pensar en los hábitos como bloques de construcción que dan forma a nuestro carácter y nos moldean hasta convertirnos en las personas que queremos llegar a ser. Son pequeñas piezas que, a la larga, pueden marcar la diferencia ya que contribuyen a crear cimientos sólidos para nuestra vida.
Frases sobre los buenos hábitos y su formación
1. “El hábito es la intersección del conocimiento (qué hacer), la habilidad (cómo hacer) y el deseo (querer hacer)” – Stephen R. Covey
El escritor del libro “Los siete hábitos de las personas altamente efectivas” sabía muy bien de lo que hablaba. Aunque normalmente los hábitos se reducen a una mera secuencia de acciones, en realidad se sustentan en la motivación. Sin el deseo, es difícil que logremos cambiar un hábito, aunque sepamos exactamente qué hacer o cómo hacerlo.
2. “La motivación es lo que te permite empezar, los hábitos te mantienen en el camino” – Jim Ryun
Este atleta nos advierte que, antes de que un hábito se forme e instaure, de manera que guie nuestro comportamiento sin tener que decidir qué haremos a cada paso, debemos esforzarnos. Cuando nos planteamos formar un nuevo hábito, la motivación es un ingrediente que no puede faltar, al menos durante las primeras semanas. Caso contrario, las posibilidades de tirar la toalla a mitad del camino son elevadas.
3. “Lo triste de este mundo es que resulta mucho más fácil abandonar los buenos hábitos por los malos” – Somerset Maugham
Esta frase sobre los buenos hábitos nos recuerda lo difícil que es mantenerlos. Lo que consideramos malos hábitos, como fumar o quedarnos tirados en el sofá cuando deberíamos estar en el gimnasio, a menudo van por un «carril preferente» porque no demandan un gran gasto de energía, nos arrastran y muchas veces incluso generan placer, por lo que es difícil resistirse a su influjo.
4. «Es más fácil prevenir los malos hábitos que romperlos” – Benjamin Franklin
Debido a que nuestro cerebro es un gran ahorrador de energía, es importante que pongamos el parche antes de que caiga la gotera. Romper los malos hábitos cuesta más que evitarlos porque una vez que se activa el circuito de recompensa, es difícil salir de ese bucle. Debemos tenerlo presente cada vez que tomemos una decisión.
5. “Tus pequeñas elecciones se convierten en hábitos que afectan las decisiones más importantes que tomas en la vida” – Elizabeth George
Con esta frase sobre los hábitos, esta escritora enfatiza la importancia de ser conscientes de las decisiones que tomamos, incluso las más pequeñas y cotidianas, porque a la larga terminarán teniendo un impacto en nuestra vida, inclinando la balanza en uno u otro sentido. Corta de raíz todo aquello que puede convertirse en un mal hábito antes de que se instaure.
Citas para comprender cómo cambiar los hábitos
6. “Cuando comprendes que los hábitos pueden cambiar, tienes la libertad y la responsabilidad de rehacerlos” – Charles Duhigg
Muchas personas no son conscientes de que pueden evolucionar. Viven aferradas a la idea: “soy así, no puedo cambiar”. Sin embargo, lo cierto es que nadie ha nacido así, de alguna u otra manera, todos nos hemos convertido en la persona que somos hoy. Y eso significa que también tenemos el potencial de cambiar lo que nos daña, la posibilidad de sustituir un mal hábito por otro mejor y más saludable.
7. “Un clavo saca otro clavo, un hábito se supera con otro hábito” – Erasmus
Los hábitos ocupan tiempo, por lo que cuando queremos eliminarlos, suelen dejar un vacío en nuestra rutina cotidiana. El cigarrillo después del café o usar el móvil antes de irnos a la cama llenan un espacio, por lo que si deseamos deshacernos de ellos, la mejor opción es desarrollar otro hábito saludable que pueda suplir ese espacio vacío y no genere la tentación de volver a las malas costumbres.
8. “Un hábito no se puede tirar por la ventana, hay que convencerlo para que baje las escaleras paso a paso” – Mark Twain
Excepto algunas personas con una increíble fuerza de voluntad y determinación, es difícil eliminar un hábito de la noche a la mañana. El escritor, que también confesó con humor: “dejar de fumar es fácil. Lo he dejado unas cien veces”, nos recuerda que a veces el camino es difícil y largo. Y que debemos convencernos a nosotros mismos cada día para no recaer.
9. «El cambio quizá no sea rápido y no siempre es fácil, pero con tiempo y esfuerzo, es posible modificar casi cualquier hábito” – Charles Duhigg
Este ganador del Pulitzer y escritor de “El poder de los hábitos” hace referencia a la necesidad de mentalizarnos para el camino que debemos recorrer y asegurarnos de tener las herramientas adecuadas: perseverancia y fuerza de voluntad. Es necesario comprender que algunos malos hábitos son muy difíciles de eliminar y tenemos que prepararnos para afrontar las posibles recaídas sin desistir de nuestro empeño.
10. “La disciplina es elegir entre lo que quieres ahora y lo que más deseas” – Abraham Lincoln
La disciplina y la determinación son clave para formar buenos hábitos. Lincoln explicaba que una persona capaz de lograr sus objetivos es aquella que antepone sus objetivos a largo plazo a la satisfacción momentánea de sus impulsos. De hecho, a una sociedad acostumbrada a tener todo inmediatamente, esta frase sobre los hábitos le viene como anillo al dedo.
Frases para reflexionar sobre el impacto de los hábitos en la vida y la sociedad
11. “Las cadenas de los hábitos son demasiado ligeras para sentirlas hasta que se vuelven demasiado pesadas para romperlas” – Samuel Johnson
Este poeta del siglo XVIII nos recuerda el poder que tienen los hábitos sobre nosotros y su influencia, muchas veces sutil pero incesante, en nuestra vida. Los hábitos son como la gota que esculpe la roca, por lo que es importante mantenernos atentos a todas esas acciones aparentemente intrascendentes porque es probable que cuando tomemos consciencia de su impacto, sea demasiado tarde.
12. “Todo aquello a lo que te acostumbras, cuando lo repites durante el tiempo suficiente, empieza a parecer natural, aunque no lo sea” – Julien Smith
Este escritor nos recuerda que los hábitos, incluso los más negativos, pueden volverse tan comunes que ni siquiera los cuestionamos. De hecho, su poder reside precisamente en que a menudo no somos plenamente conscientes de su impacto. Por consiguiente, de vez en cuando deberíamos repasar nuestras costumbres desde una perspectiva desapegada para valorar con objetividad su pertinencia.
13. “Algunas reglas no son más que viejos hábitos que la gente tiene miedo de cambiar” – Therese Fowler
Los hábitos no solo se instauran a nivel personal, también pueden ser costumbres sociales que pasan de una a otra generación. De hecho, algunas reglas asentadas en el imaginario popular no son más que hábitos antiguos que no nos atrevemos a cambiar. Por ese motivo, es conveniente valorar siempre la utilidad y el sentido de algunas tradiciones.
14. “Adquirimos el hábito de vivir antes de adquirir el hábito de pensar” – Albert Camus
Los hábitos son, en gran medida, “reflejos más o menos automáticos de los estímulos de nuestro entorno”, como decía G. Stanley Hall. Esa es una de las razones principales por la que los malos hábitos se instauran: son más una respuesta a lo que ocurre que una decisión razonada.
15. “El mejor tipo de felicidad es un hábito que te apasiona” – Shannon L. Alder
Los buenos hábitos, aunque sean repetitivos, no es algo que podamos subestimar. De hecho, puede ser una fuente de felicidad cotidiana y una razón para sentirnos agradecidos. Basta pensar en la satisfacción que puede brindarnos el café de la mañana o la música relajante antes de irnos a dormir. Por consiguiente, desarrolla hábitos que te hagan sentir bien y generen felicidad.
Por último, vale la pena recordar este profundo pensamiento de Lao Tse, que puede indicarnos el camino: “cuida tus pensamientos, se convierten en tus palabras; cuida tus palabras, se convierten en tus acciones; cuida tus acciones, se convierten en tus hábitos; cuida tus hábitos, ellos se convierten en tu carácter; Vigila tu carácter, se convierte en tu destino”.
Deja una respuesta