• Saltar al contenido principal
  • Saltar a la barra lateral principal
  • Saltar al pie de página

Rincón de la Psicología

Blog de Psicología

  • Quién Escribe
  • Libros de Autoayuda
    • Libro de Ansiedad
    • Libro de Depresión
    • Libro de Manipulación
    • Libro Crecimiento Personal
  • Temas de Psicología
  • Publicidad
Inicio » Manipulación Emocional » La trampa de la adulación manipuladora

La trampa de la adulación manipuladora

Compartir en Facebook Compartir en X (Twitter) Compartir en LinkedIn Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Email
Adulación manipuladora
 

A todos nos gusta recibir halagos, ya sea por los resultados de nuestro trabajo, por nuestros valores, comportamientos o las decisiones que hemos tomado. Y si el halago proviene de personas que son significativas, como nuestros amigos, pareja o un colega de profesión, entonces nos sentimos mucho mejor, nos sentimos orgullosos de nosotros mismos, nuestro ego se desborda.

De hecho, el elogio es una forma de reconocimiento social que puede aumentar nuestra autoestima y generar mucha satisfacción. Sin embargo, también existen personas que adulan con malas intenciones, solo para obtener un beneficio a cambio. La mayor parte de las veces ni siquiera creen lo que dicen pero se centran en nuestras virtudes para hacernos bajar la guardia y lograr que cedamos a sus deseos. Se trata de la adulación manipuladora.

¿Cómo detectar a estas personas?

– Quieren conseguir un favor a cambio del halago. Muchas veces los halagos son utilizados como la antesala para comprometerte en determinado asunto pues, al fin y al cabo, si eres tan buena persona, no te costará nada negarte a un “pequeño” favor. En estos casos los elogios más comunes son los relacionados con tu manera de actuar y de pensar, pues es la mejor manera para generar el sentimiento de culpa si te niegas.

PARA TI:  Decidimos o dejamos que decidan por nosotros: ¿Cuál es la mejor opción?

– Quieren tu aprobación. A veces el halago encubre la necesidad de aprobación, ya sea en un proyecto o en un asunto personal. No se trata de un favor propiamente dicho sino más bien de que te pongas de su parte. Obviamente, después de que una persona nos diga lo fabulosas que somos y cuán buena opinión tiene de nosotros, nos resultaría bastante complicada decirles que no estamos de acuerdo con el punto de vista que nos exponga a continuación.

– Proponen una reconciliación. Si has tenido un desencuentro con una persona, nada mejor que los elogios para intentar acercarse a ti y hacerte bajar la guardia. De hecho, esta es una manera de mostrarse arrepentido e intentar ganar tu perdón. Sin embargo, debes tener cuidado porque generalmente a este tipo de persona no les interesa recuperar la relación en sí, sino los beneficios que pueden obtener de ella.

– Esconden una traición enmascarada detrás del halago. A veces el halago no busca enaltecer para lograr algo a cambio sino que su objetivo es ganar tu confianza para luego darte un golpe bajo que te derrumbe totalmente. Es la clásica estrategia de las personas desvergonzadas y sin principios que, desgraciadamente, de vez en cuando encontramos a nuestro paso. Se trata del peor tipo de adulación ya que normalmente acarrea consecuencias negativas para ti.

PARA TI:  Perfil del chantajista emocional: 5 tácticas y 3 emociones que usan para manipularte

¿Cómo comportarse con los aduladores?

Arturo Graf afirmaba que “hombre de fácil adulación es hombre indefenso”. Por tanto, el primer paso es mirar dentro de nosotros y despojarnos de la necesidad de recibir halagos continuamente. Cuando no necesitamos algo, estamos menos ligados emocionalmente y podremos reaccionar con mayor objetividad, valorando las diferentes aristas de la situación sin hacer una tormenta en un vaso de agua.

El adulador blande dos espadas: el ego y la culpa. Si eres una persona segura de ti, no necesitarás los halagos y, por ende, te sentirás menos comprometida cuando los recibas. Recuerda además que la principal estrategia de los aduladores suele ser generar culpa. Por tanto, no dejes que te atrape en su tela de araña.

Si percibes que te están haciendo un halago para obtener algo a cambio y que este no es sincero, simplemente responde: “te agradezco la opinión que tienes de mí pero aún así, no puedo ayudarte”. Casi siempre, la sinceridad es la mejor estrategia.

 
Compartir en Facebook Compartir en X (Twitter) Compartir en LinkedIn Compartir en WhatsApp Compartir en Telegram Compartir en Email

Jennifer Delgado Suárez

Psicóloga Jennifer Delgado Suárez

Soy psicóloga. Por profesión y vocación. Divulgadora científica a tiempo completo. Agitadora de neuronas y generadora de cambios en mis ratos libres. ¿Quieres saber más sobre mí?

No te pierdas ni un artículo

Al inscribirte a Rincón de la Psicología aceptas nuestra Política de Privacidad. Pero no te preocupes, ¡odio el spam tanto como tú!

Sigue alimentando tus neuronas

Sabiduría emocional también es mirar, escuchar y decidir que eso no va contigo

Estrés en la menopausia: ¿Por qué se produce y cómo aliviarlo?

Dormir menos nos vuelve más egoístas

Interacciones con los lectores

Comentarios

  1. Ariel Gimenez dice

    25/01/2017 a las 2:22 PM

    excelente,es bueno darse cuenta como hay que comportarse con las personas y como detectar a las personas falsas

    Responder

Deja una respuesta Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Barra lateral principal

Entradas recientes

  • Sabiduría emocional también es mirar, escuchar y decidir que eso no va contigo
  • Estrés en la menopausia: ¿Por qué se produce y cómo aliviarlo?
  • Dormir menos nos vuelve más egoístas
  • Pausas de transición, el hábito que evitará que colapses por estrés
  • Si tienes este tipo de curiosidad, tu cerebro envejecerá mejor

Footer

Contacto

jennifer@intextos.com

Blog de Psicología

Artículos sobre la salud mental y el crecimiento personal, técnicas psicológicas, estudios sobre el cerebro, trastornos mentales y libros de Psicología para comprender cómo funciona la mente.

Sígueme la pista

  • Facebook
  • Instagram
  • LinkedIn
  • Telegram
  • Twitter

© Copyright 2009-2024 Rincón de la Psicología · Todos los derechos reservados · Política de Cookies · Política de Privacidad · Publicidad